lunes, 24 de febrero de 2020

CONCLUSIONES PERSONALES

Arlette Márquez Mora.


La conducta desviada requiere de gran estudio y comprensión para poder ser eliminada; mediante la contribución de cada enfoque se han sentado las bases que han permitido la utilización de herramientas útiles que dan respuestas a él origen y evolución del comportamiento.

La conducta desviada es controlable, requiere de programas de intervención sistemáticos cuyo propósito es modificar el estado conductual, emocional y cognitivo del individuo.

Alma Rosa Hernández Maldonado.

El modelo conductual, intenta dar una explicación del comportamiento humano a través de diversas argumentaciones de las teorías del aprendizaje; pues el modelo conductual de anormalidad, nos dice que los problemas psicológicos son aprendidos, es decir, que los comportamientos anormales se aprenden mediante un proceso llamado condicionamiento, donde los individuos asocian una cosa con otra. Entonces, comprendemos que en el modelo conductual se subraya la conducta observable, así como también los factores medioambientales que pueden generar y/o mantener determinadas conductas en las personas. 

Considero que uno de los hechos que marcaron el inicio de este modelo, fueron los experimentos realizaron por Watson y Rayner; dichos psicólogos indujeron el miedo a un niño hacía los ratones, y de esta manera se dieron cuenta que,  si podían  lograr que el niño aprendiera a temer a dichos animales, podían conseguir que éste desaprendiera este temor. 

El conductismo nos ofrece otra manera de realizar una intervención en el comportamiento humano; desde sus técnicas, su fundamentación teórica y con cada uno de los desarrollos que han surgido a la par de éste y en confabulación con él.  No lo veo como el modelo que oriente y/o rija cuáles deben ser los objetivos, procesos y métodos de la evaluación psicológica en la actualidad, sino que, lo considero como una de varias formas en las que los psicólogos se apoyan para intervenir en la conducta humana y una vez que éstos se adscriban con un determinado modelo, podrán identificar las variables o hechos que requieren de estudio e investigación, proporcionándoles un marco conceptual que favorezca una especificación precisa de las relaciones existentes entre los hechos que son objetos de su estudio. 

Blanca Pérez Hernández.


Las técnicas para la modificación de la conducta nos sirven para encauzar o eliminar comportamientos que no son socialmente aceptables; así como orientarlos  hacia conductas más benéficas. De igual manera, al ser aplicadas van adecuándose en torno al sujeto a tratar, en otras palabra se personalizan. Considero que poco a poco van perfeccionándose,  a efecto de conseguir que la mejora en la salud mental del sujeto impacte favorablemente su entorno.


Aunque este modelo no aborda los procesos biológicos y cognitivos que contribuyen a que se realicen ciertas conductas,  hemos de reconocer que  explica adecuadamente  la psiquis. En lo que se refiere a la aplicación de una técnica o otra, desde la perspectiva del Psicólogo deberá valorar los entornos y contexto particular del sujeto que se va a tratar.



Considero que este modelo va encaminado al tratamiento, tanto como a la prevención de trastornos conductuales, con el objetivo de promover estilos de vida más favorecedores para la persona en particular lo que afecta a la sociedad en general.


María de Lourdes González Ireta.

La lectura nos brinda un rápido recorrido desde la antigüedad hasta el presente; de como al observar y analizar el comportamiento anormal del individuo y como tratarlo se llegó a la psicología clínica que es ahora.
Las primeras explicaciones que se dieron para “el comportamiento raro fueron por la magia, los designios misteriosos o por causa de los espíritus; el tratamiento por medio de limpias, pócimas, ritos o ceremonias.
La religión Cristiana abordo este tipo de comportamiento como “posesión” o “castigo divino”; forma de curación: exorcismo, tortura o muerte (Kantor, 1990, Compas y Gotlib, 2003). Ya en el siglo XVI la iglesia obtiene una postura compasiva hacia los individuos trastornados por lo que crean los primeros hospitales para el tratamiento de la locura.
 En los siglos XVII y XVII los hospitales eran como centros de reclusión donde los locos eran aislados de la sociedad; el tratamiento era por medio de purgas, sangrías y vómitos. Eran encadenados y torturados (Hothersall, 1997).
En el siglo XIX cambio la forma de ver a las personas con estos padecimientos. Pinel, Tuke y Dix lograron el cambio en las condiciones de vida de estos pacientes, crearon centros especiales y trato humanitario. Donde se creé que el comportamiento disonante se debe a condiciones biológicas y el tratamiento se basa en lobotomías, inducción de coma, terapia electroconvulsiva y fármacos psicoactivos para curar la “enfermedad mental”.
A finales del siglo XIX y el XX surgen las teorías psicológicas: la psicoanalítica, conductual y cognoscitiva.                                                                                                        
Freud “psicoanálisis” el problema es causado por los impulsos sexuales, tratamiento: libre asociación, interpretación de los sueños o los actos fallidos.
Junk dice que los problemas de comportamiento se basan en la energía psíquica. Adler el instinto de superioridad.
Segunda mitad del siglo XX Horney, Fromm y Stack resaltan la influencia de la cultura en el desarrollo de la personalidad.
Surgiendo la psicoterapia humanista, la existencial, de proceso experiencial, etc. Witmer es el primero en utilizar el término de “psicología clínica” y surgen las propuestas teóricas, experimentales y aplicadas de Pavlov, Watson y Skiner que basándose en la conducta observable y el aprendizaje surge el conductismo (Rimm y Masters, 1987); donde trataron fobias, ansiedad, neurosis, etc. Empleando modificación de la conducta, terapia conductual, etc.
La teoría cognitiva surge paralela al conductismo; en ella Galton elabora la primera batería para medir el intelecto, Catell construyo pruebas mentales, Binet la primera prueba de “inteligencia”, Goddard estableció categorías para determinar el nivel intelectual (Gregory, 2000). Piaget la psicología genética (1964) y Vigotski la psicología cultural (1974).
El modelo cognitivo-conductual: Woodworth la psicología motivacional, Bandura el aprendizaje social, Meichenbaum “autoverbalizaciones”, Ellis terapia racional emotiva (1962), Beck terapia cognitiva en 1979.
En la actualidad las técnicas cognitivas que se emplean son: la terapia racional emotiva conductual, la reestructuración cognitiva, la solución de problemas, la inoculación del estrés, la terapia centrada en esquemas, la terapia de constructos personales, la terapia de valoración cognitiva, la psicoterapia constructiva y la psicoterapia cognitivo-narrativa (Caro, 1997).
La teoría interconductual que estudia la conducta en los organismos en lo individual; su objetivo es identificar las condiciones históricas, situacionales y paramétricas de los factores que participan en su interacción, incluyendo la posibilidad de generar tecnología (Ribes y López, 1985). Interviene analizando, evaluando, regulando y probabilizando la conducta.



Miriam Leonor Lara Arredondo.

Las investigaciones realizadas con animales muy característica del modelo conductual, lo que dio pauta para la observación de las conductas, estos trabajos fueron fundamentales para la construcción de este modelo que tiene como idea que el aprendizaje está influido por el entorno.

Así pues, los estudios realizados con animales fueron pauta para que los investigadores se acercaran al estudio de la naturaleza humana y la sociedad, situación que dio forma al campo de la psicología educativa, campo en el que ha dado grandes frutos.

Entre las numerosas aportaciones de Watson está su afirmación acerca de que la psicología debería estudiar los fenómenos observables (la conducta) y no la mente. 

La terapia conductual busca reforzar las conductas deseables y eliminar aquellas no deseadas (desadaptativas); el refuerzo y el castigo se utilizaron para aumentar o disminuir la frecuencia de un comportamiento, por esto es que el comportamiento es un elemento crucial a observar y modificar. 


Por todo lo anterior, la terapia conductual ha sido efectiva en el tratamiento de adicciones, ansiedad y en el trastorno obsesivo-compulsivo; el éxito está en la idea que el el comportamiento puede ser aprendido y por ende modificado, busca ayudar a que las personas aprendan nuevos comportamientos positivos que reduzcan al mínimo o eliminen el problema.


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